Campeonato Alevín y 2ª Fase Judex

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Otro fin de semana de competición. Esta vez el escenario fue Montijo (Badajoz) y nuestros protagonistas (además de Irene y David, se sobreentiende), Carlos Arrojo en categoría infantil y los alevines Alberto, Antonio, Carlos González, Guillermo, Irene Rodríguez, Lucía y Patricia.

Los más peques comenzaron con un calentamiento lúdico en grupo y luego, separados por pesos, se sentaron alrededor del tatami de competición para aguardar su turno. Hay que decir que todos se comportaron de manera ejemplar, sobrellevaron los nervios como ya quisieran muchos mayores, independientemente de resultados (que fueron EXCELENTES) supieron ganar y perder con respeto y deportividad, volvieron locos a los árbitros solo lo justo (¿cuándo me toca? ¿y yo porqué no salgo? ¿ahora ya?) y terminaron deseando repetir.

Entre los mayores destacar el soberbio estreno de Carlos Arrojo que con unos pocos meses de judo marcó dos ippones de escándalo ante cinturones mucho más altos. No le perdáis la pista porque va a dar que hablar.

David solucionó sus combates como a él le gusta, con judo vistoso, sin dejar lugar a dudas entre los árbitros y, para variar, sin hacernos sufrir.

Eso esta vez quedó para Irene que, después de ir ganando de wazari desde los primeros compases cayó en el ÚLTIMO segundo (doy fe) y tuvo que llegar a técnica de oro, en la que se impuso con un ippón por estrangulación.

A falta de la última fase que se disputará el día 3 de marzo probablemente en Badajoz, tanto David como Irene son ya, numéricamente, Campeones de Extremadura y nos representarán en el Campeonato de España de mayo que este año se celebra en Cáceres. ¡UN GRAN Y MERECIDO APLAUSO PARA LOS DOS!

Tampoco me puedo olvidar de mencionar a los otros miembros de la Escuela que aguantaron como valientes el madrugón y el intenso frío para arropar a sus hermanos: Inés, Miguel y Myriam, que en esta ocasión tuvieron que contentarse con animar desde la grada pero pronto tendrán su oportunidad.

Y por último, pero no menos importante, a los papás que sufridisfrutaron con los combates de sus hijos y de los contrarios casi por igual. Nunca dejo de sorprenderme de la gente tan encantadora que se reúne en torno al judo. Un abrazo a todos.